Para Gabrielle Chanel, los botones eran un elemento de decoración muy importante. Una vez que la diseñadora decoró con ellos sus famosas chaquetas de tweed, a partir de herrajes delicadamente brillantes con diversos adornos, incluidos motivos de camelias y bizantinos, los botones se convirtieron en un verdadero símbolo de la casa de moda.
Este año, el legado de Coco Chanel ha inspirado a los joyeros de la marca francesa para crear la colección de relojes Mademoiselle Privé Bouton. Se compone de siete modelos, incluidas las ediciones limitadas. Las piezas incorporan el puño de la icónica chaqueta, adornado con un gran botón secreto.
Detrás de los preciosos herrajes de camelia, una cabeza de león de oro o un camafeo de ágata con el perfil del fundador de la casa de moda se encuentra una esfera pavimentada con diamantes. La correa se sustituye por un tweed adornado con un trenzado dorado.
