La innovación relojera más ruidosa de Chanel en los últimos años, el Code Coco, que cuenta con una versión dorada del icónico cierre de bolsa 2.55 de Chanel, se viste de brillante cerámica negra. Es más bien una pieza de joyería con una esfera que no ha sido cubierta con una tapa secreta. Un brazalete flexible, eslabones y cierres de líneas limpias, un diamante en talla princesa: una vez más, la división de relojería-joyería de Chanel ha ideado un accesorio precioso que el gran fundador habría aprobado. De ahí el nombre «Código Coco».
